Se dice que la poesía llega primero a través de nuestros oídos. Desde el momento en que tu bebé está en tu vientre, puedes hacerle saber que estás allí, siempre a su lado y para él.
Basta con hablarle y cantarle, acariciarlo y mecerlo con suaves movimientos de tu cuerpo.
Comunicarte con tu bebé durante el embarazo es crucial para forjar ese vínculo único entre madre e hijo.
Él escuchará cuando tarareas una canción y aprenderá a reconocer tu tono y el ritmo de tu voz. Siempre reconocerá el latido de tu corazón.
Y cuando finalmente esté en tus brazos, ese latido y el tono de tu voz lo harán sentir protegido y amado.
Mucho se habla sobre los beneficios del arrullo, no solo para ayudarlos a dormir, sino también para calmarlos en momentos de llanto, ansiedad o berrinche.
El balanceo rítmico y el arrullo también fortalecen su tono muscular, pero más allá de eso, les brindan seguridad. Se sienten arropados y abrazados al mundo, especialmente a los brazos de la persona que más los amará en este viaje.
María Emilia López sostiene que todo esto “construye una envoltura no solo física, sino también un gran apoyo psíquico y corporal”.
Por todas estas razones, acuna, arrulla, arropa, abraza y canta a tu bebé desde el momento en que sientes que está allí, comenzando su vida dentro de ti, mamá. 🌟👶❤️
Fuentes: // Yahoo! Noticias // Naran Xadul // Las nanas infantiles // María Emilia López // Filij //
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