Los abrazos y besos que le das a tu bebé tienen un impacto significativo en su desarrollo cerebral, según revela un estudio llevado a cabo por investigadores del Nationwide Children's Hospital en Ohio.
Este estudio, que involucró a 125 bebés, tanto prematuros como nacidos a término, exploró cómo respondían al contacto físico, como los abrazos y las caricias.
Se descubrió que el contacto físico afectaba el desarrollo cerebral, especialmente en bebés prematuros, quienes mostraban una respuesta un poco menor a las caricias en comparación con los bebés a término. Sin embargo, aquellos prematuros que recibieron más muestras de cariño y abrazos, ya sea por parte de sus padres o del personal médico, mostraron una respuesta cerebral más fuerte.
La Dra. Nathalie Maitre explicó que el contacto piel con piel y el arrullo tienen un impacto significativo en el desarrollo cerebral del bebé. En especial, en los prematuros, estas muestras de afecto pueden marcar la diferencia y facilitar una transición más suave a casa sin complicaciones.
El afecto es esencial para el desarrollo cerebral, especialmente en los bebés prematuros. Para aquellos nacidos a término, el amor y el contacto físico también son igualmente beneficiosos. Estas demostraciones de afecto no hacen que los bebés se vuelvan consentidos o dependientes; al contrario, son fundamentales para su salud y su desarrollo intelectual.
Fuentes: // Yahoo Noticias // Google Imágenes // Microsoft Start // Naran Xadul // Ruiz Silvia //
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