Este malestar se conoce como prurito genital y no siempre se relaciona con una infección. Además de esto, puede originarse por sequedad en la piel, alergias o infecciones, entre otras posibles causas.
Las doctoras Sofía Herrera y Klara Senior, ginecólogas y fundadoras de Tu Salud Íntima, una plataforma dedicada a proporcionar educación, productos y servicios para el cuidado de la salud femenina, especifican que el prurito puede manifestarse tanto en el área vulvar como en la vaginal.
"Es importante recordar que 'vulva' se refiere a la zona externa, mientras que 'vagina' se refiere a la interna. En la zona vulvar, la picazón puede presentarse de manera aislada sin ningún otro síntoma. En la mayoría de los casos, puede deberse a la sequedad de la piel en la vulva, así como a reacciones alérgicas a productos cosméticos de higiene, limpiadores, desodorantes o productos menstruales como toallas interdiarias o toallas menstruales. También puede haber alergia a detergentes de la ropa interior, suavizantes, látex en el caso de uso de condones", explica Herrera, agregando que también existen causas menos comunes de prurito en la zona vulvar.
"El prurito puede deberse a dermatitis atópicas, liquen atrófico que suele aparecer en la menopausia, o el crónico, una enfermedad de la piel cuya causa no está definida. Otra causa poco común es el cáncer de la piel en la vulva".
En cuanto al área interna, el prurito vaginal suele ser consecuencia de sequedad o infecciones vaginales, ya sea por hongos o bacterias. En el segundo caso, según el Manual Merck, algunas de estas infecciones incluyen vaginosis bacteriana, candidiasis y tricomoniasis, y deben ser diagnosticadas por un médico, quien también recetará el tratamiento adecuado.
"Si la picazón se acompaña de cambios significativos en la piel, como enrojecimiento, inflamación, áreas muy blancas o engrosadas, o si se presentan cambios en el flujo vaginal, es importante consultar a un médico, ya que podría tratarse de una infección", advierte Herrera.
Los cambios en el flujo incluyen un aumento de volumen, alteraciones en color, olor y textura. Herrera destaca: "Un flujo que normalmente es blanco puede volverse constantemente amarillo, volverse muy espeso como leche cortada o cambiar su olor suavemente ácido por un olor similar a carne en descomposición, son señales de alerta".
En cuanto a las causas menos frecuentes de prurito en el área vaginal, se incluyen alergias al látex o al semen de la pareja. También pueden presentarse alergias a algunos lubricantes, especialmente aquellos con saborizantes o fragancias, así como a los que contienen silicona o glicerina.
En el caso del prurito vaginal debido a la sequedad, las expertas destacan que la característica principal es la presencia de picazón tanto en la parte externa como interna, acompañada de dolor durante las relaciones sexuales. "Esto puede ocurrir por diversas razones: cuando la mujer está hormonalmente estable, la picazón por sequedad puede deberse al exceso de higiene, utilizando productos fuertes que contienen jabones o detergentes".
Estos productos, al igual que el jabón común, pueden resultar irritantes y eliminar el manto de grasa natural de la piel, que es lo que la mantiene hidratada, provocando así la picazón. También puede ocurrir cuando las hormonas se alteran y los niveles de estrógeno y progesterona están por debajo de lo normal.
"Esto puede suceder en diversas etapas de la vida, siendo la menopausia la causa más común y normal de la sequedad vulvar y vaginal. Sin embargo, también puede haber una alteración hormonal debido a anticonceptivos de implante, inyecciones o parches, algunos dispositivos intrauterinos que contienen hormonas, o incluso algunas píldoras, lo que podría causar sequedad en la piel y la vagina".
¿Qué hacer en estos casos?
Si se descarta una infección debido a la ausencia de los síntomas mencionados anteriormente, es crucial revisar los hábitos de higiene. Más limpieza, más jabón y mayor frecuencia de lavado no siempre equivalen a una mayor salud. Lo correcto es llevar a cabo una limpieza adecuada sin exagerar.
"Si hablamos de picazón debido a sequedad, en primer lugar, la mujer debe adoptar buenos hábitos de higiene. Debe limpiar solo la parte externa de los genitales una o dos veces al día, utilizando agua y un producto específico para piel sensible, que no contenga detergentes, fragancias, silicona ni parabenos, y preferiblemente con ácido hialurónico, ya que hidrata la piel. En segundo lugar, después de la limpieza diaria, es recomendable hidratar la piel de la vulva. Para esto, existen productos en gel a base de agua, sin silicona, glicerina ni parabenos ni fragancias, y en este caso, también es beneficioso el ácido hialurónico".
Así como cuidamos nuestro rostro y nos preocupamos por hidratarlo y aplicar productos para mejorar su apariencia, también debemos prestar atención y cuidar nuestra zona íntima. Herrera subraya la importancia de no lavar la zona íntima por dentro, sino solo por fuera, de manera delicada y con productos adecuados en cantidades moderadas. "Cambiando este simple hábito y proporcionando hidratación a la piel, la picazón causada por sequedad desaparecerá".
Fuentes: // Yahoo! Noticias // Imagen de Google // Adriana Terán //
